La cuarentena obligatoria acarreada por la aparición del covid-19, ha demostrado no solo el incremento de problemas de salud física, sino también, problemas a nivel de pareja.
El estrés suscitado por la cuarentena ha sido un detonante para que muchas parejas se vean afectadas y cambien su interacción, llegando en los casos más extremos a la violencia.
Cambios en las relaciones de parejas
Debido a la cuarentena obligatoria muchas parejas han pasado cambios en su convivencia, para algunos ha sido una oportunidad de estrechar lazos, disfrutar la intimidad del hogar, desarrollar la comunicación o usar formas creativas para recrearse.
Para otros, el hogar que era considerado un lugar de descanso y unión familiar se ha convertido en una fuente de tensión, posiblemente porque se han visto en la obligación de trabajar en casa, por la influencia de los medios de comunicación, la organización de las labores domésticas, el cuidado de los hijos, la recreación que es limitada por la prohibición de la salida, entre otras.
La convivencia ininterrumpida ha disminuido las áreas personales y ha generado una mayor observación de las actividades de la pareja, creando un sentimiento de poca independencia en muchos de los casos.
Otro cambio importante y limitación que se ha visto reflejado a consecuencia de la cuarentena son las reuniones familiares, las reuniones de amigos o la socialización con los compañeros de trabajo, lo que era una forma de interacción alternativa a la pareja y provocaba gratificaciones, actualmente debido a la coyuntura no se puede satisfacer y se observan más personas con problemas emocionales como ansiedad, depresión y estrés, y, por ende, mayores conflictos en la pareja.
Investigaciones
Este problema no ha pasado desapercibido, por lo que se han hecho investigaciones para medir el impacto de la pandemia en la interacción de pareja. La universidad de Guadalajara en México ha realizado esta investigación la primera mitad del año 2020, recolectando la información a través de una encuesta virtual a 760 personas, acerca de las relaciones de pareja en el contexto de la pandemia.
Los resultados en cuanto al cambio en la rutina demuestran que un 68.5% de las parejas colaboran y hacen cosas juntos, un 62.4% tienen mas tiempo para platicar y convivir y un 45.3% hace lo que desea de forma independiente. En cuanto a la percepción de tensiones o conflictos durante la pandemia ocurrió en un 51.8% de las parejas, siendo las mujeres las que percibieron mayor tensión que los hombres. En cuanto a las edades, el 58.9% de los jóvenes con edades comprendidas entre 18 y 37 años presentaron más tensiones y conflictos con sus parejas.
Por otro lado, las parejas con más años de relación (de 10 años más) presentaron un mejor manejo del conflicto en la cuarentena a comparación de las parejas con menos tiempo de relación (1 a 9 años). Entre las razones de los conflictos de las parejas, un 58.4% refirieron que se debía al estrés y tensión por la cuarentena, mientras que otro porcentaje menor refirieron que era debido a que la pareja pasa más tiempo en el celular o que no habría tantos temas en común para conversar, entre otras razones.
Con estos resultados podemos apreciar que en general las consecuencias por la cuarentena más significativos fueron positivas, con una percepción de parejas más colaboradoras y con predisposición a la comunicación. En cuanto a los conflictos, la mitad de los encuestados percibieron más tensión, especialmente las mujeres y las parejas más jóvenes. Por otro lado, las parejas con más tiempo de relación supieron manejar mejor los conflictos. Estos datos son solo una pequeña muestra que no puede ser generalizada, pero nos da un indicativo de la naturaleza de la relación de pareja en la cuarentena.
Violencia de pareja durante el confinamiento
Otra información relevante que ha salido a la luz a raíz de la cuarentena obligatoria es el aumento de la violencia en la pareja, especialmente mayor hacia la mujer.
La OMS lanzó un comunicado alertando sobre el problema de la violencia hacia la mujer que ya se veía corroborada con investigaciones anteriores, a raíz de esto la OMS alertó por un posible aumento debido a las medidas obligatorias tomadas, lo que provocaría un mayor contacto con las parejas violentas y con una menor posibilidad de buscar ayuda externa ya sea en la familia o con instituciones de protección.
En nuestro país igualmente se ha informado sobre el aumento de la violencia hacia la mujer, especialmente de violencia física según datos del Ministerio de la mujer y poblaciones vulnerables, estos casos con mayor incidencia en los departamentos de Cusco y Junín.
Conclusiones
Esta pandemia ha cambiado la forma de interactuar de muchas parejas, posiblemente con mayores consecuencias negativas en parejas que previamente presentaban problemas en la comunicación, intimidad, sexualidad o en la expresión de afecto.
Ante esto, es crucial fortalecer la relación de pareja mediante el desarrollo personal de ciertos aspectos claves como el manejo eficaz de las emociones, la empatía o la autoaceptación, que conlleven a una interacción más saludable basada en el respeto, tolerancia y asertividad. Así mismo sería de suma importancia que los gobiernos tengan preparados planes de contingencia en caso de situaciones extremas como las vividas por el COVID-19, con programas de fortalecimiento de la salud mental.