¿Cuando dejamos de ser niños?  

Pregunta que a menudo parece no tener sentido pues “como ya somos adultos” debemos comportarnos como tales, de pronto nos quitaron el juego amoroso, sonrisas pícaras, travesuras y sueños casi sin darnos cuenta. A tierna edad nos pusieron un uniforme y nos enseñaron que 1 + 1 = 2 y como esto siempre...
Publicado el 21-03-2018 a las 19:07

Pregunta que a menudo parece no tener sentido pues “como ya somos adultos” debemos comportarnos como tales, de pronto nos quitaron el juego amoroso, sonrisas pícaras, travesuras y sueños casi sin darnos cuenta. A tierna edad nos pusieron un uniforme y nos enseñaron que 1 + 1 = 2 y como esto siempre ha sido así, no debemos cuestionarlo. Entonces pasamos a ser parte de un grupo donde se nos “educa” para la vida y no para SER FELICES.

Introducción

En muchos casos hemos crecido escuchando lo que es la vida y que debemos hacer para que nos vaya bien según modelos establecidos, tal vez poca gente te dicen que has nacido para “realizarte” (verdadero significado: realzar tus talentos) pero antes de todo: para amar.

Llega el tiempo de madurez conforme pasan los años, olvidamos de vivir para nosotros mismos, siempre hay una persona por la cual “me preocupo” como si esto fuera sano. No hay tiempo para dar rienda suelta a la imaginación, creatividad, soñar en grande y fantasear un poco, hacer castillos de arena, etc.

Simplemente conectarme con mi niño interior. Protegedme de la sabiduría que no llora, de la filosofía que no ríe y de la grandeza que no se inclina ante los niños. Khalil Gibran

Decretos errados

Durante nuestro desarrollo y sin ninguna mala intensión tal vez, hemos escuchado algunas frases como “ya crece”, “madura de una vez”, “ubícate en el tiempo”, “y tu edad”, “compórtate por favor”, etc. que han venido mermando nuestra confianza y evolución.

De pronto se cortaron las ilusiones, los juegos sanos y nos metieron en vestidos con tacones y trajes con corbata sin objeción alguna, para estar dentro del contexto, ni parecer tontos o ser aceptados por el resto decidimos adoptar fielmente posturas de “grandes” olvidándonos que “los más grandes son buenos niños pequeños…”

La infancia tiene sus propias maneras de ver, pensar y sentir; nada hay más insensato que pretender sustituirlas por las nuestras. Jean Jacques Rousseau

Modo adultos

Cuando optamos en dejar de ser niños cometemos un gran error. Cabe resaltar la importancia que nos da la madurez y todo aquello que forma parte del desarrollo emocional y personal lo que se tornará en el bagaje de conocimientos y experiencias de forma individual, en este punto quiero mencionar que es imposible tener una mirada de niño sin los brazos protectores del adulto (inocencia y sabiduría). Como adultos tenemos metas y sueños que debemos ir por ellos.

Modo niños

Ser niños es poder disfrutar de una sorpresa o regalo, observar sin juicio, confiar libremente, compartir sin esperar nada a cambio, disfrutar de mi labor honestamente, no dejar de jugar con otros niños (hijos, sobrinos), tener ganas de seguir aprendiendo con entusiasmo, amar nuestras pasiones o gustos, demostrar abiertamente nuestros afectos, disfrutar de la lluvia, césped o tierra, dejar que la vida nos sorprenda sin forzarla, disfrutar un día a la vez.

He llegado por fin a lo que quería ser de mayor: un niño. Joseph Heller

Esta escrito: “En verdad les digo que si no se convierten y se hacen como niños, no entrarán en el reino de los cielos” Mateo 18.3. Extraordinarias palabras del maestro Jesús quien predicó con el ejemplo.

Ser como niños también se refería al lado inocente de ellos, donde no existe malicia y su corazón es fuente de bondad e infinito amor. ¿Podremos ser como niños en estos tiempos?

La respuesta es Sí. Inmediatamente el cerebro racional que cree que todo lo sabe y controla nos dirá que ya tienes cierta edad y debes de pagar cuentas a fin de mes, velar por tu casa, empresas, maestrías, autos nuevos, etc. y está bien que cuides tus posesiones y tu hogar, aquí el tema va más allá de razonamientos lógicos establecidos por unos cuantos.

Algunas diferencias entre niños y adultos

<b>NIÑOS</b> <b>ADULTOS</b>
Comparten Compiten
Amor incondicional Condicionamos el amor
No hay preocupación Siempre preocupados
Juegan a SER Quieren SER sin saber que
Ríen la mayor parte del día Reír no es seriedad
Imaginación sin límites Límites mentales
No tienen miedo Muchos miedos
No prejuzgan Juzgan y critican
Ríen desde lo más profundo Risas fingidas
Viven el momento Vienen en el pasado o el futuro

Algunos consejos

Si lo desean, los que son padres pueden ver en sus hijos un ejemplo de libertad y sabiduría, los que no, siempre hay un niño cerca del cual aprender y si no lo hay observa al niño más amoroso y sabio que conoces (Tu). Empieza a volver a relacionarte con tu niño interior y preguntarle que le falto hacer o que desea ahora, te encontrarás con muchas sorpresas y con ganas de “volver a vivir” sin dejar de tener los 30, 40, 50, 70 o más años para hacerlo.

Toma el control de tu vida sintiéndote ese niño, no importa que digan los demás solo tienes este momento para vivirlo honestamente y que escribir tu propia historia.

No estoy diciendo que renuncies a tu familia, amistades o empleo, claro si este último no te hace feliz deja que la vida se lo lleve y te entregue algo mejor.

Que no te importe el “qué dirán”, se observa con frecuencia lo fácil que es criticar y ventilar la vida privada en las redes. ¿Esto hace un adulto responsable? ¿Y si buscamos apoyo profesional? (Al contar tus problemas por internet porque lo único que haces es victimizarte).

Vivimos en tiempos modernos donde todo va muy rápido y queremos “para ayer las cosas”, estamos enfocados en el dinero y cosas materiales que se nos está olvidando lo más importe que es el amor.

Conecta con tu niño interior permitiéndole que se exprese provocará grandes cambios para tu evolución y el de toda nuestra sociedad pues todos estamos conectados.

Existe una fuerte necesidad de felicidad real no la que nos venden a través de medios publicitarios. Muchas personas me preguntan por qué es tan difícil disfrutar y dejar nuestras posturas de adultos, la respuesta es más simple ya que radica en las “creencias” que heredamos cuando nos formábamos, éste es el inicio de no poder disfrutar la vida tal cual es: maravillosa.

Conclusiones

Regresa a sonreír como un niño, has travesuras, mójate los pies en el mar, ve al campo a caminar con amigos, hagan fogatas, si no hay dinero un termo con café y tostadas es suficiente lo importante es estar juntos y reír, cómprate esa bicicleta que tanto querías, aprende a patinar o cualquier actividad que siempre te gusto, cuanta estrellas, baila como quieras, inventa una carpa con sábanas y utiliza una linterna, cuenta cuentos, también pregúntale a un niño que sueña o siente, al final toma un espejo y ríe mientras te contemplas y hazte la promesa que jamás te volverás a olvidar de ti mismo.

Amate con locura. Hemos venido a esta vida para ser FELICES no PERFECTOS.

Comentarios
Nauj Esoj
Nauj Esoj
Muy cierto y lo aplico en mi vida en la actualidad vivimos como adultos pero no recordamos lo que antaño nos formo nuestra infancia "Nuestra diversión esta limitada por nuestra imaginación" buen post !
Marilia Neyvi Najarro Ortiz
Marilia Neyvi Najarro Ortiz
No dejamos totalmente de tener el alma de niño porque hay ocasiones en que decimos como quisiera ser niño para volver a jugar y saltar como lo hacíamos en aquella época.