Muchas veces me he preguntado: ¿Por qué uno se hace maestro? Resulta difícil hallar una respuesta única y clara. Su labor tan elogiada y, a la vez, tan enigmática abre múltiples puertas a preguntas cuyas respuestas quizá seguirán siendo un misterio.
Introducción
En este sentido, por ejemplo, tenemos diversas series que rinden homenaje a esta función y nos rememoran historias por la que probablemente hayamos pasado.
Pensemos, por ejemplo, en el “Chavo del ocho” y su personaje “el Profesor Jirafales” o quizá en series más actuales como Merlí (serie catalana) o Rita (producida en Dinamarca), las cuales nos muestran seres humanos con sus particularidades y su amor por la enseñanza y por las personas.
Cada uno de nuestros maestros tiene su propia historia. Ellos nos preparan para hacerle frente a este mundo tan real y duro, nos dotan de su sapiencia y nos invisten con su amor. Y, probablemente, lo que sea mejor que todo es que no nos piden nada a cambio.
Día del maestro
Cada 6 de Julio celebramos el día del maestro en el Perú. En cada escuela del país se le rinde un homenaje a modo de agradecimiento. Los alumnos se organizan para danzar, bailar, regalar algo a quienes los acompañan día a día. Si lo pensamos bien, el ser maestro es algo curioso. Es una labor de donación, de entrega. Consiste en dar lo más humano de sí mismo con mucho tacto y pasión.
Ellos conviven con nosotros. Disfrutan de nuestras alegrías más intensas y, seguramente, lloran lo más doloroso de cada alumno. Muchas veces dicen que la escuela es nuestro segundo hogar y, por esto, nuestros maestros son esos otros padres, que nos contienen y nos llevan de la mano a un tópico o a ese curso que nos resulta tremendamente tedioso comprender. Y lo que somos ahora, lo que hemos aprendido, seguramente, también se lo debemos a ellos…
Primeros maestros
La función docente se inicia en las sociedades primitivas, encontrándose dentro de estas: Egipto, Grecia, Roma y Mesopotamia. Mientras que en Egipto se gestaba y extendía la escritura, en Grecia las historias se reproducían a modo oral. En Roma, los niños iban a la escuela primaria.
Para la llegada de la Edad Media, la Iglesia cobró un gran protagonismo y dominio sobre la enseñanza. Es por esto que los antiguos musulmanes y los judíos intervinieron como intermediarios entre Grecia y sus estudiosos europeos. Así pues, encontramos que uno de los primeros maestros más grandes de la historia fue Sócrates, quien enseñó a Platón, el cual tuvo luego a Aristóteles como discípulo. Es Sócrates quien enuncia la frase: “La verdadera sabiduría está en reconocer la propia ignorancia”.
Día del Maestro en el Perú
Se eligió celebrar cada 6 de Julio debido a que fue en esta fecha cuando el libertador don José de San Martín fundó la primera Escuela Normal de Varones en julio de 1822. Fue el gobernador Odría quien oficializó el 4 de mayo de 1953, el 6 de julio como día del Maestro. Antes de esta fecha, lo que se solía hacer era rendir homenaje a los amautas incas.
Para ese entonces el analfabetismo era abundante en este lugar y los niveles educativos de la población andina eran terriblemente bajos. Y así se sigue, hasta el día de hoy, homenajeando a los maestros. Quienes cumplen una labor de entrega y sacrificio, con la fundamental misión de trasmitir los conocimientos sobre los que nos apoyaremos como ciudadanos.
Conclusión
No sé cómo vaya, de qué trate o qué se pretende. Sé que nuestros maestros nos dejan una huella, una marca profunda. Sabemos lo que es ser estudiante, alumnos, pero no todos sabemos lo que es ser maestro. Una labor tan importante y necesaria. Pregunta, preocupado, mi sobrino de 10 años: Por qué uno se hace maestro… Le digo: Por amor.