Estás en la mina en busca de oro. De repente, tu pico aparece roto y desaparece la luz. El saboteador ha entrado en acción. Pero, ¿Quién entre quienes participan es el saboteador? ¿Encontrarás el oro antes o conseguirán los saboteadores que sus oscuras acciones lo impidan? Quien consiga más oro gana.
Todo un éxito como juego y de los más divertidos en “fastidiar” al adversario. Quienes juegan son enanos dentro de una mina, pero pueden ser buscadores de oro o saboteadores… Los dos grupos se enfrentarán sin saber quién es quién. Sólo se sabrá al final: si los buscadores han conseguido llegar al tesoro, ganan pepitas y los saboteadores no ganan nada; pero si los buscadores vuelven con las manos vacías, ¡los saboteadores tendrán su botín!
Las cartas de oro se colocan boca abajo a 7 cartas de distancia del inicio. El oro está en una de las cartas de final, pero nadie sabe cuál. Cada persona tiene cartas en la mano. En tu turno, debes hacer una de tres cosas: colocar una carta de camino en la mina, jugar una carta de acción frente a una persona o pasar.
Las cartas de ruta forman caminos que conducen a las cartas de final. Las cartas deben jugarse adyacente a una carta de ruta ya jugada. Todos los caminos de la carta de ruta deben coincidir con los de las cartas ya jugadas, y las cartas de ruta no se pueden jugar de lado. ¡Agarraos a vuestros picos!, las traiciones y las venganzas están garantizadas…